Cómo evitar el calorcito del verano

En pleno verano, puede parecer que las temperaturas frescas y refrescantes nunca volverán. Estarás constantemente volviendo a aplicar desodorante, revisando si tienes manchas en las axilas y limpiándote el sudor de la cara a escondidas. Todo este calor, y el sudor resultante, pueden hacerte sentir menos sexy. Nadie tiene tiempo para ponerse juguetón cuando está empapado en sudor. Aquí tienes algunas maneras de refrescarte y estar listo para disfrutar del calor donde debe estar: ¡en la cama!

Aplica un poco de presión… con hielo

A todos nos encanta un masaje sensual, pero puedes subir la intensidad y bajarla al mismo tiempo. Es fácil hacerlo con o sin pareja. ¡Solo necesitas hielo! Mete unos cubitos en una bolsa, envuélvela en una toalla y aplica el hielo en los puntos de presión: tobillos, parte posterior de las rodillas, muñecas, codos, cuello y sienes. ¡Sentirás los efectos al instante y estarás listo para todo!

Tomar una siesta

No hay nada peor que estar afuera con el sol pegando fuerte mientras trabajas duro. Evita los rayos UV entre las 11:00 y las 14:00 y tómate una siesta. Puede ser un descanso tranquilo, pero seguro que se te ocurren otras cosas que hacer durante ese rato en la cama. Tómate un tiempo para ti o con tu pareja para explorar nuevas fronteras sexuales.

Ponte picante

¡En serio! La comida picante aumenta la circulación y, al sudar, te refrescas. La capsaicina , un componente de los chiles, aumenta la frecuencia cardíaca y libera endorfinas que mejoran el estado de ánimo. Esto puede ser una excelente forma de estimulación sexual. Disfruta de alimentos que incluyan cayena, curry y comino para sentir sus beneficios.

Abraza a tu niño interior

Era cierto de niño y sigue siendo cierto hoy: una de las mejores maneras de refrescarse en un día caluroso es comiendo una paleta. La única diferencia: ahora puedes añadirle alcohol. Cómpralas en tu supermercado favorito , encuentra recetas de paletas caseras con alcohol en cualquier lugar y, si quieres enfocarte en opciones saludables, también hay recetas de paletas de frutas. ¡Lame y chupa hasta relajarte!

Desnudarse

¡Quítate esas capas molestas! Opta por telas transpirables que le den a tu cuerpo la oportunidad de refrescarse. Quizás quieras invertir en ropa de dormir ligera y vaporosa (y sexy) con colores que combinen con el verano. Si te sientes cómoda, opta por lo natural.

Aprovecha la tecnología

¿Quién recuerda estar frente a un congelador abierto en un día extremadamente caluroso intentando desesperadamente refrescarse? ¡Pues hay una mejor manera! Pon tu fragancia refrescante favorita en el refrigerador y rocíate cuando más la necesites. Otra forma de aprovechar el aire fresco es meter las sábanas en el congelador 30 minutos antes de acostarte. Imagina acurrucarte entre esas sábanas frescas y agradables. ¡Se acabó tener que apartarte de los abrazos porque hace demasiado calor!

El verano llegará a su fin (eventualmente) ¡pero recuerda que hay muchas formas de refrescarte hasta entonces!