Sexteo seguro: cómo obtener consentimiento en línea

¿Qué es el sexting?
El sexting se define comúnmente como enviar o recibir mensajes sexuales, como imágenes de desnudos o semidesnudos, o mensajes sexualmente explícitos, a través del teléfono móvil. Es un ejemplo de cibersexo, un término general que incluye el sexting, el sexo telefónico y el intercambio de contenido en línea mediante aplicaciones móviles, computadoras u otros dispositivos.

El sexting es una excelente manera de comunicar deseos, necesidades sexuales y fantasías. Y, aunque puede ser divertido y emocionante, es importante incluir el consentimiento en la conversación.

¿Cómo solicito el consentimiento digital?
Al igual que el consentimiento en persona, necesitas el consentimiento digital antes y durante las actividades sexuales. Dado que es un paso previo a una actividad más íntima, tómate el pre-juego igual de en serio. Así que, antes de enviar ese mensaje o foto atrevida, asegúrate de estar protegido diciendo algo como: "Tengo algo sexy que me gustaría compartir, ¿te importaría que te lo enviara?".

Ten en cuenta que, aunque usemos el teléfono constantemente, no significa que todos estén dispuestos o puedan recibir mensajes o imágenes sexualmente explícitas en cualquier momento. Puede que tu destinatario no esté de humor o esté ocupado con otra cosa en su teléfono. ¡Sé educado!

Cosas a tener en cuenta antes de enviar mensajes de sexo:

1. ¿Quiero enviar mensajes de sexo?

Comunicarse con una pareja o una posible pareja conlleva todo tipo de presiones. No envíes mensajes de sexo si te sientes incómodo, sea cual sea el motivo. Incluso con una pareja estable, no está bien sentirse presionado a enviar mensajes de sexo. Comunica que no te interesa o que has cambiado de opinión sobre el sexting; si alguien no respeta este límite, es señal de una relación poco saludable. Las relaciones poco saludables pueden tener consecuencias negativas, como chantaje (o ciberacoso), acoso sexual u otras formas de abuso en el noviazgo. Este tipo de sexting puede ser extremadamente dañino e incluso ilegal.

2. ¿Conozco a la persona con la que estoy enviando mensajes sexting?

Puede parecer fácil, pero con las redes sociales, puede que no lo sea tanto. Hoy en día, interactuamos virtualmente con muchísima gente a través de aplicaciones como Instagram, SnapChat y Facebook, pero eso no significa que conozcas a la persona. Quizás te guste hablar con ella e incluso inicies una amistad o una relación romántica, pero recuerda que la privacidad, la honestidad y la confianza son aspectos importantes de las relaciones, no solo cuando se trata de sexting. Habla sobre sexting con la persona en cuestión para conocer su opinión primero.

3. ¿Confío lo suficiente en esta persona como para enviar y/o recibir mensajes sexuales?

Como se mencionó anteriormente, las aplicaciones de redes sociales son una forma de comunicación muy popular. Incluso puedes enviar y recibir mensajes directos que parecen privados. Sin embargo, cuando se trata de internet o de mensajes enviados a través de un teléfono móvil, nada es realmente privado. También debes considerar que los mensajes de sexo podrían compartirse con otros. Incluso si otra persona ve una imagen o un video privado sin querer, es fundamental comunicar tus intenciones y la confianza que depositas en la persona a la que envías o recibes mensajes.

En resumen, aunque el sexting pueda parecer casual, el consentimiento y la confianza siempre son necesarios. Al enviar o recibir imágenes o mensajes sexualmente explícitos, guárdalos. Nunca está bien compartir imágenes o mensajes privados de alguien con otros.

Si recibes un mensaje, imagen o video sexual no deseado, elimínalo de inmediato y sé directo en tu respuesta. Dile al remitente que te incomoda recibir ese tipo de mensajes y pídele que deje de hacerlo.

Cuando adultos consienten en el sexting, puede aumentar la comunicación sexual, mejorar la intimidad y la satisfacción sexual general en la relación. ¿Necesitas ideas? Consulta Sexting 101.